El príncipe Felipe no ha heredado aún la corona pero sí el desprestigio popular de su padre. En sus cuatro últimas apariciones públicas en Toledo, Madrid, Alcalá y Valladolid fue recibido con pitos e insultos en la calle, mientras que a su hermana Cristina y su marido Iñaki Urdangarín también los reciben así en Barcelona. Por ello, la Casa Real ideó ayer una “salida espontánea” de Felipe por la madrileña Carrera de San Jerónimo y la Puerta del Sol, que sorprendió a los pocos madrileños que se le acercaron. Fueron pocos minutos, seguido por un guardaespaldas y unas cámaras de televisión, y rápidamente se retiró de la escena. Poco se diferencia del antiguo “Nodo” en las formas y en el contenido, como apenas se distingue ya esta Monarquía de partidos de la dictadura de Franco, que designó heredero a su padre.

El pasado martes, cerca de un millar de personas recibieron con pitos al ministro de Educación, José Ignaco Wert, y a los Príncipes de Asturias a su llegada a un centro educativo de Valladolid donde se inauguró oficialmente el curso 2012-2013 de Formación Profesional (FP). A la llegada de Felipe y Letizia la frase que más se coreó fue “Felipe, vete al siglo XII”.

Hace un mes, la escena se repetía en la localidad toledana de Fuensalida, donde acudieron para inaugurar el curso escolar. Allí, delante de los periodistas y cámaras de televisión, una treintena de personas que llevaban camisetas verdes como símbolo de defensa de la educación pública abuchearon y silbaron de nuevo a los príncipes de Asturias, la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, y el ministro Wert, a las puertas del colegio de la localidad, cuidadosamente escogido por el Ministerio para la ocasión. No se lo esperaban. Las consignas más escuchadas fueron “Más educación, menos corrupción”, “Ni un paso atrás contra los recortes”, “Más plantilla, menos mantilla” o “Manos arriba, esto es un atraco”.

 

 

Este mismo año, las protestas fueron aún más ruidosas cuando Felipe y Letizia acudieron el 23 de abril a la entrega del Premio Cervantes en Alcalá de Henares en compañía de Mariano Rajoy. Allí los alcalaínos los recibieron al grito de “Borbón, cabrón, trabaja de peón”, tal y como recoge este vídeo.

En la última Feria del Libro de Madrid, la escena también se repitió. La periodista de Vanitatis, Lara Fernández, tituló: “Abucheos a Wert y al príncipe en la inauguración de la Feria del libro: “Recortes al Borbón, no a la Educación”.

“Las protestas contra el heredero al trono patrio sirvieron como preludio de lo que ocurriría ya por la noche durante el partido que enfrentaba al Fútbol Club Barcelona y al Athletic de Bilbao, al que acudían juntos nuevamente don Felipe y Wert. En concreto, se escuchó un “¡Viva la República!” y otro que rezaba “Recortes al Borbón y no a la educación”, que rápidamente fueron eclipsados por un grupo de tímidos monárquicos”, señalaba la periodista.

En Barcelona ocurre lo mismo. La periodista Emilia Landaluce de “El Mundo” afirma que “al parecer, la fianza del duque de Palma ascenderá a ocho millones de euros y si no los desembolsa en 24 horas, le podrían ejecutar el palacio de Pedralbes y dos apartamentos. La vuelta de los “Urdanga” en Cataluña resulta incomprensible. Sin exagerar, casi a diario, recibo una llamada de Barcelona contándome algún encontronazo con la pareja en la que por lo general predominan los abucheos y los insultos. Y también el arte. Como muestra, esta de Uriginal que ha plasmado al duque en una sucursal de La Caixa. La imagen resume bien la situación del país”.

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