Desconfía (foto: machacon) Cataluña oficial y Cataluña real La titular del Ministerio de Defensa, integrante del poder ejecutivo como parte del Gobierno de España, la número uno de la lista del PSC por Barcelona, Carmen Chacón, ha expresado a su manera, que lo que legisla un parlamento no puede ser declarado ilegal por un Tribunal. Lo que ha dicho no es distinto de aquello atribuido al inefable Alfonso Guerra: “Montesquieu ha muerto”. Doña Carmen ha dicho que el que manda, manda, y todos los demás a obedecer ¿Como puede ser que un Tribunal corrija la plana a la clase política?   Doña Carmen no entiende que si una ley abusa o agrede alguno de los derechos fundamentales de los ciudadanos, aunque cuente con el consenso de la clase política, una Justicia independiente puede, y debe, anularla.   Con independencia de que los nacionalistas ocultan que el origen de la política de inmersión lingüística fue su empleo por parte del recién formado Estado de Israel como única posibilidad de que todos los ciudadanos de ese nuevo país, emigrados de todos los puntos de la tierra, cada uno hablando el idioma de su país de procedencia, se entendieran, o sea, con independencia del contenido de la ley cuestionada, efectivamente, Montesquieu no es lectura de cabecera de los privilegiados por la Constitución de 1978, los partidos financiados por el Estado.   Si los ciudadanos de Cataluña no reaccionan ante la expresión más evidente de pensamiento totalitario, antidemocrático, que un miembro de la clase política puede hacer, sólo puede explicarse por el éxito de la campaña de propaganda permanente de in-concienciación de la sociedad frente al Estado. Aunque cada día más ciudadanos van reconociendo la verdadera y perversa naturaleza del régimen político que nos gobierna, y se alejan de él como se alejaron del régimen de Franco; aquella famosa dicotomía entre la España oficial y la real.   Mientras el Gobierno de España, del que es Ministra Doña Carmen Chacón, manifiesta su respeto por las sentencias y resoluciones judiciales; la primera de la lista de PSC-PSOE por Barcelona arremete contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña; tribunal en el que ninguno de sus magistrados ha sido nombrado sin la aquiescencia del poder político en la Autonomía de Cataluña. No olvidemos el hecho de que el TS de Cataluña ha decidido aplazar la ejecución de la sentencia. La partidocracia necesita jueces y tribunales sumisos, pero la Justicia le es ajena.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí