El amago de Madrid de no organizar manifestación el 24j, miedo a los acontecimientos, sabemos que acudirán muchos autobuses. Pero Bilbao, Barcelona, Valencia, todas las marchas han puesto de manifiesto que esto no tiene "marcha atrás". Se han unido a nosotros unas 20 o 30 personas provenientes de Murcia y Alicante, que algunos han salido a recibir a la entrada de la ciudad.   La asamblea por la tarde ha sido numerosa, más de doscientas personas, pero no popular, de masas. Si esta marcha no convoca a miles en una ciudad de este tamaño es porque algo falla; deberíamos anunciarnos como los circos. Ayer no se hizo ningún trabajo de convocatoria, no se leyó ningún bando. La mayoría de los albaceteños son ajenos a nuestra presencia, no saben siquiera que estamos. Para colmo no hay unidad y algunos han decidido acampar en la plaza en lugar de en el polideportivo que nos han dejado.   Por otra parte, intermarchas, que es el órgano de comunicación y coordinación entre las distintas marchas, está aún trabajando (consensuando) las medidas o exigencias para discutir en Madrid. La libertad constituyente suena y está bien vista pero todavía la mayoría lo ven algo lejano. Todavía no ha sucedido el cambio de mentalidad. La servidumbre educa pedigüeños, la libertad conquistadores.   Lo que sí está consiguiendo esta marcha múltiple es la creación de redes alternativas de comunicación y organización por si la cosa se pone fea y desembarca el FMI en España. Intuyo que los que hoy son reticentes a promover la libertad constituyente esperan una calamidad de tal calibre como si fuera una oportunidad que favorece la causa de la libertad. Es cierto que aumentarían el descontento y la indignación, pero también los disturbios por la imposición de la escasez. Está claro que tanto tensar al final se va a romper la vara, pero cuanto peor lleguemos a estar, más difícil será salir. Flaco favor nos hacemos aceptando los planes que se nos imponen como si no hubiera de sobra argumentos para que los españoles se organicen con la libertad.