Los Jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea pedirán a los bancos que aprovechen las facilidades que les han dado para “mantener y apoyar el crédito a la economía y hacer repercutir en los prestatarios las reducciones de los tipos de interés centrales” (el Euribor sigue estando demasiado alto, ha advertido el presidente del BCE). La recesión se cierne sobre toda la UE, y dada la amplitud de la crisis, los Veintisiete consideran necesario un “esfuerzo acrecentado y coordinado”. En ese sentido, la Comisión Europea está dispuesta a ser flexible en la aplicación del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que obliga a los países de la eurozona a mantener sus déficits públicos por debajo del 3 por ciento. En España, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, anuncia la adopción de “medidas extraordinarias” si las entidades financieras no facilitan el crédito -sobre todo el circulante- a las pequeñas y medianas empresas que forman el tejido productivo nacional y no bajan el precio del dinero, aliviando la carga de los hipotecados; el Gobierno ha puesto en marcha un proceso para suministrar liquidez a los bancos y además ha concedido los avales que garantizan su estabilidad, y por lo tanto, ha de exigírseles que respondan “al reto que tienen ante la sociedad”. El presidente de la consultora Analistas Financieros Internacionales, Emilio Ontiveros, nombrado en algunos medios como posible sustituto de Pedro Solbes, augura que el BCE situará los tipos por debajo del 2%, bajándolos hasta el 1’5% el año que viene; y ha defendido la necesidad del control que deben ejercer las autoridades sobre el destino del dinero público que se da a los bancos, verificando que esas ayudas llegan efectivamente a una “inversión crediticia” cuya normalización es imprescindible para ver “algo de luz” en 2010 e ir saliendo de la crisis. El señor Ontiveros cree que “no es el momento de hacer ascos a los apoyos públicos” y que hay que centrarse en cómo levantar a la economía española de la depresión, ya que tenemos por delante “varios trimestres de crecimiento negativo”. A pesar de todo, Zapatero nos anima a confiar en que las previsiones sobre una recesión global sean “erróneas” tal como lo fueron “al no pronosticar la crisis actual”. hechos significativos “El nacionalismo es contrario a la defensa de España” (Fraga); éste no alude al franquismo sino a los nacionalistas del régimen actual, a los que habría, dice, que “colgar de algún sitio”. Esperanza Aguirre decide romper con el mayo del 68.