El desbordamiento crediticio de los últimos años se ha trocado en una sequía de liquidez que amenaza con agostar la economía productiva. La evaluación de riesgos que llevan a cabo bancos y cajas al conceder un préstamo ha cambiado de forma drástica. Tras el huracán financiero, todas las entidades quieren adelgazar sus balances, con el fin de reducir la exposición a los peligros que se derivan de su negocio, aunque con ello ganen menos dinero. Cuando la necesidad de crédito a corto plazo resulta más acuciante a causa del parón económico, los bancos han cerrado, de un mes para otro, el grifo de la deuda nueva, lo que está afectando gravemente a los que se embarcaron en procesos de ampliación, de la mano de esos mismos bancos. “Lo que no se puede hacer ahora es negar el préstamo a casi todo el mundo” sin atender a “la solidez del proyecto”, ha declarado el señor Gómez Navarro, presidente del consejo superior de Cámaras de Comercio. Los bancos, que no se fían de nadie, tampoco se prestan dinero entre ellos. El mercado interbancario se ha colapsado, como se pudo comprobar hace dos semanas, cuando los bancos centrales concertaron excepcionalmente una bajada de los tipos de interés (de medio punto) que no se trasladó al Euribor. Mientras el gobierno español, en sus iniciativas de salvamento, no ha considerado prioritario dicho mercado para reactivar el flujo crediticio , en Alemania han reservado 400.000 millones de euros (el 80% de su programa) para garantizar ese tipo de préstamos. Al restringir la liquidez y subir los tipos a lo largo de este año, el BCE ha contribuido a empeorar la situación, y sólo ha reaccionado, garantizando dinero ilimitado, ante el hundimiento de todos los mercados. Por otra parte, el éxito del gigantesco rescate es incierto, ya que los gobiernos están reflotando un sistema que, en su obsesión por reducir sus riesgos, se muestra reacio a dejar de cortar el suministro financiero. “Un sector que no se compromete con la economía real no merece ser salvado” ha sentenciado el “Financial Times”. hechos significativos Vacláv Klaus, el presidente de la República Checa, afirma que las alarmas sobre el calentamiento global son intentos de limitar el desarrollo de la prosperidad en el mundo. El gobierno holandés entra en el grupo ING, que tiene más de 75 millones de clientes, inyectando un capital de 10.000 millones de euros. Los Secretarios de Defensa y Estado de los EEUU ultiman un pre-acuerdo para que las tropas abandonen Iraq en 2012.
Amigos
Bombay (foto: Óscar) Amigos A Rafael Serrano La libertad que fortalece el pensamiento, que viste el comportamiento, que permite encontrar la verdad en todos los rostros, que prohíbe la soledad espiritual, que trasciende la Filosofía, la Poesía, la Ciencia y la Religión; la libertad que tanto puede, no es grata. En el universo de los hombres, que es ontológicamente libre, la libertad es difícil de soportar. Asusta a los esclavos reaccionarios que la sienten como una halitosis de la voluntad, amedrenta a los esclavos liberales que la creen un valor negativo individual, espanta a los esclavos libertarios que la consideran un arma de la justicia. Todos ellos son crueles, acomodaticios y groseros. La libertad aleja a las beldades sumisas y acerca a los complejos belicosos; la libertad, ahora que los humanos son enanos, es repugnante. Sólo los drogadictos y los viejos chamanes saben cuánto asquea tener que tomar a todas horas el amargo trago del conocimiento. Ni Sócrates habría soportado viajar todos los días a Eleusis. La libertad que, entregándonos a los demás, nos enfrenta constantemente a nosotros mismos, necesita la compensación de los sentimientos calientes que alegran su estela vulgar. Porque la libertad es vulgar como un domingo en movimiento. Vulgar sin rutina, porque hila todas las piezas de la existencia cotidiana. Vulgar porque gozaría igualmente sin las disquisiciones de los pensadores y sin la guía de los moralistas, vulgar porque entretiene a la propia vida como una representación teatral. No corresponde a nadie, ni puede retenerse, ni conservarse tal como fue; es vulgar como el tiempo. Por eso necesita iluminarse además de con sus propios frutos (la creación), con la presencia amiga. Y la intimidad de un hombre libre es una creación de fe y belleza; lo he visto en el amigo. Si el tacto de los libres está desnutrido, las almas que se vinculan –y lo saben- en esta situación, se apretarán como pájaros en vuelo de niebla llegada, sintiendo el fin de la otra ala en el viento. Conocerán la amistad como los hombres del campo piensan la tormenta. Y pensando, pensando a mi amigo, vuelvo a ser libre como si remara.
Obama y el mundo
Descartada la posibilidad de que Obama pierda las inmediatas elecciones presidenciales en EEUU, y comprometido su apoyo al novedoso Plan de rescate de las entidades de crédito, decretado por el Gobierno saliente del ultraconservador Bush, lo que va a prefigurar su estatura como hombre de Estado, y no del Estado, son sus primeras decisiones en materia internacional, terreno donde ha recibido las mayores críticas a su inexperiencia. Por esto nos llama la atención que el Washington Post (17 de octubre) tome partido por Obama porque, entre otros motivos de orden nacional, “tiene una profunda comprensión de la realidad mundial y del papel de América, y un compromiso para mantener el liderazgo de EEUU sin renunciar a los valores democráticos”, creyendo “que es el hombre adecuado para un momento peligroso”. Afortunadamente, Obama no es un pacifista fanático en iluminaciones idealistas, como lo fue el nefasto presidente Wilson, quien no escuchó en lo sustancial a sus interlocutores europeos Clemenceau y Lloyd George -el italiano Orlando era un comparsa mudo-, para imponer sus utópicos 14 puntos en el Tratado de Versalles, de junio de 1919, que puso fin a la primera guerra mundial, contra Alemania, sentando las bases propiciatorias del nacimiento de los nacionalismos totalitarios y de la segunda guerra mundial de 1939. Obama pondrá fin a corto plazo a la guerra de Irak, pero incrementará la intervención militar en Afganistán, con el riesgo de agravar la tensa relación con Pakistán, pues sigue con la obsesión Ben Laden, creada por Bush, con su mitológica guerra preventiva contra el terrorismo islamista, nacida de los escombros del 11 de septiembre. Donde comprobaremos la verdadera talla de Obama es en su actitud ante la caliente situación en Palestina y Líbano; en su posición ante la creciente instigación de la OTAN y la UE, apoyando los excesos nacionalistas de Kosovo, Georgia y Ucrania contra Serbia y Rusia; en la contención nuclear de Irán; en el entendimiento de la extensión capitalista de China; y en el ejercicio del liderazgo mundial en el combate contra la pobreza y el calentamiento de la atmósfera. Estos problemas, en segundo término con la alarmante situación mundial de las finanzas, acuciarán la agenda diaria de Obama, tan pronto como tome posesión de la Casa Blanca. florilegio "En el mundo globalizado, la diplomacia no puede seguir siendo brazo político del ejército, ni modo disuasorio de aplazar conflictos armados. Sólo la justifica la inteligente búsqueda de intereses comunes con el adversario, que siempre existen. "
Rescate financiero
Por fin el Gobierno aprobó los dos Decretos-Leyes esperados, uno de ellos crea “El Fondo para la Adquisición de Activos Financieros” adscrito al Ministerio de Economía y Hacienda, con una dotación de 30.000 M€, ampliable a 50.000 M€, dirigido y auditado por sus órganos, que enviará un informe cuatrimestral al Congreso de los Diputados, salvo que haya algún otro mecanismo de control. El otro tendrá por objeto autorizar el otorgamiento de avales del Estado a las operaciones de financiación nuevas que realicen las entidades de crédito residentes en España hasta un importe máximo de 100.000 M€ en 2008. Esta semana pasará el trámite de convalidación parlamentaria, en el que cada uno de los autómatas de lista de partido apretará el botón “SI” desde su escaño, sin rechistar; a lo más, el jefecillo de cada grupo cantará las angustias que sufre la patria. ¡Qué hipocresía! Bolsa de Madrid (foto: Edgar González) Son tan enormes estas cantidades aprobadas que mucha gente se ha quedado estupefacta. Este Fondo de rescate va a manejar más dinero que todos los 8.111 Municipios de España durante 2007 en el que sus presupuestos alcanzaron los 53.000 M€ aproximadamente y ese Ministerio les está regateando parte de la financiación de los servicios prestados alegando que en la crisis económica todos deben arrimar el hombro. ¡Qué sarcasmo! La regulación de ese fondo es una nebulosa, un cúmulo de conceptos indeterminados (“títulos de máxima calificación”, “selección por los mecanismos habituales del mercado”) que conducen directamente a esa cesta de préstamos hipotecarios de difícil amortización, bonos o cédulas compradas a otros bancos, cédulas que han emitido y no han podido vender en los diversos mercados financieros y sobre todo aquéllas que no podrán amortizar a su cercano vencimiento. Los ciudadanos y las empresas, necesitados de financiación, descuentos de letras y pagarés, quedarán lejos de la mesa de este festín. Quizás, con un poco de suerte, les caiga alguna migaja. ¡Qué injusticia! Ante esta descomunal crisis financiera ¿Qué va a ocurrir con esas “Agencias de rating” (sociedades de calificación) que certificaron a diestro y siniestro la excelencia del que pagaba sus informes? ¿Qué va a ocurrir con los reguladores, los Bancos Centrales, en los que habíamos depositado la vigilancia de las instituciones financieras? ¿En qué mercado van a colocar esa inmensa cantidad de Letras, Bonos o Pagarés del Tesoro, si Estados Unidos de América y los Estados de la Unión Europea van a hacer lo mismo?
¿Qué crisis?
Los diagnósticos de la crisis se dividen en dos: la crisis es financiera y la crisis es económica. No cabe duda que su causa inmediata principal es financiera (en la que, por cierto, no parece tenerse en cuenta la influencia de los petrodólares), aunque en parte es económica (exceso de construcción inmobiliaria pero no sólo eso). En realidad, se trata de una grave crisis política y social: el fracaso del Estado de Bienestar, un Estado eminentemente Fiscal y Burocrático, y de las clases dirigentes. Quizá cierre el ciclo del Estado Total. En suma, la crisis del Estado. Ahora bien, la causa última concreta, desde el punto de vista político económico, es el abandono definitivo del patrón oro. Éste constituye un obstáculo para las manipulaciones de los gobiernos. Bajo el patrón oro, las inversiones dependen de los ahorros. Sin el patrón oro, las inversiones dependen menos de los ahorros que permite el fisco, y casi enteramente de la voluntad de los gobiernos: en términos simplistas, de la fabricación de dinero-papel a discreción de los Bancos, pero, en definitiva, de las decisiones de los Bancos Centrales controlados por los políticos. De ahí que la política se haya reducido progresivamente a la política económica dictada por los gobiernos, cada vez más omnipotentes –los gobiernos, no los Estados-, según las opiniones, los gustos, los caprichos, las necesidades demagógicas o, simplemente, los intereses políticos. El crédito, en último término papel-moneda, ha financiado el llamado Estado de Bienestar, que sería preferible llamar Estado Providencia: el Estado como el dios mortal, el dios de este mundo. Pues, reducida la política a la economía, quien dispone del dinero crediticio manda absolutamente y hay que adorarle. Exagerando un tanto, la política se ha reducido a la lucha por disponer directamente del dinero público (impuestos y, en su caso, inflación) –el Presupuesto es la verdad de la política, decía Schumpeter- y del control del empleo del crédito. Para los mismos ahorradores, lo más prudente es invertir en lo que digan los políticos, que cuentan con el sistema fiscal y especialmente con determinados impuestos (Irpf, patrimonio, plusvalía, etc.), generalmente elevados, para “orientar”, o sea, manipular las inversiones a gusto de los políticos, sus amigos y sus clientelas. Naturalmente, esto favorece la corrupción, puesto que, a mayor intervención del Estado, mayores son las posibilidades (y la necesidad) de hacer negocios por y con los políticos. Los Estados son hoy centros de negocios. Y no cabe duda que el aspecto financiero de la crisis tiene que ver con la corrupción, incluso legal, como la “ingeniería financiera”, motor directo de esta crisis, que nada tiene que ver con la de 1929, cuando aún no existía el extenso e intenso Estado de Bienestar. Ahora, al parecer, los gobiernos pretenden sacralizar la corrupción acudiendo descaradamente en ayuda de los causantes de la crisis.
Par-lamento
Desde distintos medios de comunicación los analistas, periodistas e incluso el señor Rajoy, piden que la ayuda financiera del Estado a los bancos sea controlada y fiscalizada por el Parlamento. ¡Ilusos! Como si en treinta años de régimen posfranquista el Parlamento hubiese servido alguna vez para controlar o vetar al gobierno de turno. Zapatero y Botín parlamentan En el Parlamento Español, los únicos que fiscalizan y lo vigilan todo, tienen asientos de privilegio en el banco azul. Los demás obedecen o no pueden oponerse. No hay allí representantes legítimos de los españoles: ni uno. Nuestros diputados no reciben correos de sus electores pidiendo que se pronuncien en este ó aquel sentido, como ocurrió en EEUU al inicio de la crisis. Algo que resulta envidiable; pero que seguirá siendo inconcebible en un país donde se escogen listas de beneficiarios de los aparatos de los partidos. Aquí, las cosas ocurren de otra manera. El dinero de todos los españoles, irá destinado a los fines que la oligarquía financiera señale al gobierno, y éste obedecerá sin rechistar. Así funcionan las oligocracias desde los tiempos de Platón. No olviden, que la primera reunión de urgencia entre Zapatero y Emilio Botín, se produjo en… el despacho de este último. Está clara cuál es la jerarquía, la relación de mando y obediencia. Sobre las medidas en sí, nos tememos lo peor, pues el parche no devendrá en remedio sin verdaderas reformas estructurales y la crisis continuará o se recrudecerá. El sentido común, como una varita mágica, señala las grietas que produjeron el hundimiento, y cuya causa se podría resumir con una palabra: descontrol, tanto de los movimientos financieros como políticos. La única luz que veo al final del túnel, es la posibilidad de reconstruir, sobre las ruinas de esta Monarquía de Partidos, un nuevo sistema político donde la iniciativa inteligente y decente de la sociedad civil ancle con fuerza en el firme los railes de la libertad política, y así recorrer todos juntos, una nueva travesía con el tren de la democracia representativa. En este sistema, el Parlamento, ¡ahora sí una Cámara de Representantes! garantizaría el control al Gobierno y vigilaría su acción. La corrupción generalizada y la plutocracia tendrían sus días contados. Estaríamos gozando de las virtudes de una República Constitucional.
Ostracismo
Ostracón (fuente: Wikimedia Commons) En la antigua Grecia, se puso en práctica la condena por ostracismo para luchar contra las tiranías. Los políticos que traicionaban la democracia ateniense se enfrentaban a la posibilidad de ser desterrados durante diez años, y se utilizaba para proteger el sistema político de las personas que trataban de medrar aprovechándose del mismo. Los partidos políticos de nuestro país están endeudados con la banca privada en varios millones de euros. En concreto, según el informe del Tribunal de Cuentas correspondiente a los estados contables de los partidos políticos en 2005 (publicado en abril de 2008), la deuda del PSOE ascendía a más de 61 millones de euros, la del PP a más de 15 millones, las del PNV y CiU a más de 14, la de IU a más de 13. Las recientes medidas adoptadas por los partidos políticos para afrontar la crisis en nuestro país incluyen fuertes inyecciones monetarias a las entidades bancarias. O lo que es lo mismo, pagar con dinero público los errores de entes privados. Me pregunto por qué esas mismas entidades no repartieron también sus beneficios con los ciudadanos del mismo modo que nos reparten ahora sus pérdidas. Si los partidos políticos fueran realmente representativos de la sociedad civil, jamás se atreverían a cometer la tropelía de cubrir las pérdidas de particulares con el dinero de sus representados y sin recibir ninguna contrapartida. Pero en esta partitocracia donde los partidos se han convertido en órganos estatales que sólo se representan a sí mismos, lo único que se puede esperar es que sirvan fielmente a sus verdaderos propietarios: la oligarquía financiera. Quizá sea muy mal pensado al elucubrar con la posibilidad de que esas entidades financieras, en agradecimiento por la inyección de capital, condonarán parte de la deuda que algunos de estos partidos mantienen con ellas. Mientras tanto, el ciudadano de a pie seguirá condenado al ostracismo político y económico al que lo tienen sometido los partidos estatales, para defenderse de la libertad política que los desterraría definitivamente de la tiranía que ejercen desde el Estado.
Caballo ganador
La fama de los intelectuales no guarda relación en España con el talento o la competencia. Aquélla, salvo raras excepciones, depende del oligopolio editorial, de la propaganda oficial, y del oportunismo político. El caso del profesor Savater resulta paradigmático. Los clásicos distinguían entre el estilo de una filosofía sólida y rigurosa, pero inevitablemente pesada, y el de otra, que debe procurar ser amena, aunque pueda incurrir en frivolidades e inconsistencias. Pero a un mero divulgador de grandes pensadores no cabe encuadrarlo ni siquiera en el campo de la filosofía mundana. Tampoco es un epígono de los filósofos que iniciaron en el siglo XX una gran revolución (Husserl, Russell) que fue seguida por otra no menos grande (Heidegger, Wittgenstein); Savater no llega a alcanzar la categoría de posfilósofo. El cinismo, el hedonismo y el escepticismo son modalidades de una moral que no puede cimentar una ética comunitaria. Y si la moral que soporta a la ética política es la racional, el que nunca se ha preocupado de transformar la partidocracia en una democracia no deja de ser un posrazonador. A pesar de ser uno de los más feroces enemigos de la poesía y de lo imaginario, Platón fue uno de los mayores creadores de mitos que ha conocido el pensamiento universal. En uno de sus diálogos, se refiere al amante “de la sabiduría o de la belleza” como si éstas fuesen realidades indistintas, ya que la belleza es lo “más resplandeciente” y por tanto ilumina todo lo demás. Alejado irremisiblemente de la filosofía perenne, quizá Savater, desde una zona residual, haya querido adoptar el punto de vista estético de los pensadores que, como Unamuno y Santayana, fueron capaces de escribir novelas. Este antiguo libertario y moderno estadólatra ha sido recompensado con un Premio llamado Planeta, que se convoca como si fuese un acontecimiento cultural (La Fiera Literaria dixit), cuando no es más que una grosera operación de mercadotecnia editorial. Si el principio de toda filosofía es el hecho de maravillarse ante todo lo que es como es, en la trayectoria de este patriota constitucional no puede sorprendernos que haya sido el ganador de un concurso fraudulento, con una novela cuya trama gira alrededor de una carrera de caballos. Éstos no son los talentos culturales merecedores de prestigio público. Fernando Savater (foto: wicho)
Anarquismo individualista
Nostalgia de anarquismo (foto: lulazzo) El movimiento anarquista nació en una época en la que la distinción entre Ley y norma específica había sido ya obliterada. De ahí la gran incoherencia final de su pensamiento, ejemplificada en Stirner, quien la llevó hasta sus últimas consecuencias. Cuando se afirma que “no hay ley para el individuo singular” y que éste debe imperar sobre aquélla, se está indicando en el mejor de los casos la pertinencia de valorar la libertad individual por encima de medidas coactivas innecesarias del gobierno o la sociedad. Pero si éstas se confunden con la Ley, entonces existen pocas salidas salvo la práctica del “terrorismo personal” (expresión de Stirner). Efectivamente, la única posibilidad de que la libertad individual exista para todos se basa en la asunción general de unos principios implícitos generados intersubjetivamente que no son menos reales y determinantes que la autonomía personal. Estos principios, determinados históricamente, guían la conducta dentro de un contexto más amplio que la mera soberanía personal, y de hecho la protegen. Debiera llamarnos la atención el hecho de que el anarquismo prosperara en todos los países europeos salvo Inglaterra, justamente allí donde se generaron los principios liberales que daban cuenta eficazmente de este peculiar equilibrio entre lo subjetivo y lo intersubjetivo (autonomía y ley). Y no por nada tantos y tantos revolucionarios descastados, empezando por Marx y Lenin, encontraron en él domicilio fijo. Si, como insiste F. A. Hayek, persistimos en obviar la diferencia entre ley y legislación (normalización concreta y principio de la que emana), la libertad individual por la que claman tantos anarquistas libertarios no dejará de ser un fiasco egoísta, utópico y funcionalmente nulo. El anarquismo ha sido una firme aproximación a la libertad individual pura, más allá de los convencionalismos y coacciones interesadas varias, y por eso su espíritu debe ser aún recogido. Pero dado que en el momento culmen –su pretendida autonomía radical– olvida la esfera intersubjetiva como un todo, a saber, el hecho de que cada momento evolutivo es reflejado también en el acuerdo entre dos y más sujetos, no es capaz de contemplar que los principios de la Ley siguen operando también ahí, y que éstos son necesarios para preservar la libertad individual entendida no espiritualmente, sino como el negativo de la coacción social.
Regulaciones
En el seno de la UE reclaman la necesidad de una reforma del sistema financiero internacional y una refundación del capitalismo que dote a los mercados de una regulación que impida desastres como el actual y proporcione seguridad a los ciudadanos. Sarkozy propone algo “muy simple”: que ninguna institución financiera escape a la supervisión. El presidente francés cree que han de tomarse medidas urgentes contra los “hedge funds” (fondos de inversión que se dedican a operaciones especulativas) y los paraísos fiscales. El primer ministro británico, que ha llevado la iniciativa europea, propone medidas de aplicación inmediata. El establecimiento, que llevarían a cabo las autoridades nacionales, de 30 colegios de supervisores para las mayores instituciones financieras transfronterizas; y un Sistema de Alerta Global que identificara y amortiguase los riesgos de la economía global y la estabilidad financiera. Zapatero confía en el liderazgo de la UE para fijar “un nuevo marco” a los actores financieros y económicos; según el presidente, la crisis ha demostrado que “la fiebre por reducir el papel del Estado no funciona”. Sin embargo, el señor Botín descarta la entrada del Gobierno en el accionariado de los bancos españoles por su “solvencia y fortaleza”; atribuye la crisis a los excesos y la pérdida de referentes, es decir, la prudencia para no aceptar niveles de endeudamiento desproporcionados y la valoración adecuada de todos los riesgos; y pide a las autoridades una “hoja de ruta” que no genere confusión. Por su parte, el gobernador del Banco de España tiene muy claro lo que ha de producirse: un proceso de reestructuración de las entidades financieras que puede consistir en una fusión. Don Emilio afirma que las soluciones a la crisis pasan por dejar “claras” las reglas a seguir” y por evitar el “riesgo moral”, o sea, “no transmitir el mensaje de que se puede actuar sin responsabilidad sobre los errores que se cometen”. Todo esto quedó ejemplificado con el caso de las cesiones de créditos del Santander, donde el Estado decidió no intervenir, y el TS estimó que la acusación popular no es suficiente para iniciar o continuar un litigio: la “doctrina Botín”. hechos significativos El juez Garzón pide los certificados de defunción de Franco, Mola y Queipo de Llano. Imputados tres técnicos de Spanair por el accidente de Barajas.

